El Tetraedro es un Superyate futurístico que podrá ser observado – en un futuro no muy lejano – en las cálidas aguas de la isla Española Ibiza. El Tetraedro diseñado por el Londinense  Jonathan Schwinger tiene forma de pirámide y recrea la visión de lo que será un yate de lujo en el futuro. Al igual que los conceptos de vehículos, por el momento esta embarcación existe solamente en un lote de bellas imágenes y no se sabe si el diseñador y su equipo tienen planeado desarrollar la construcción de esta magnífica creación.

Como en un sueño, el Superyate se mantendría elevado durante operaciones normales a medida que la velocidad se vaya incrementando gracias a un puntal unido a un propulsor en forma de torpedo. El Tetra se mantendría elevado a medida que gana velocidad y a través a los hidroplanos ajustables montados en los laterales. Mientras esté estacionado, el puntal es recogido dentro de la embarcación, la cual flota en la superficie debido a las carcazas laterales.

La forma de la cubierta tiene dos “líneas marinas” para su operación, dijo Schwinger en su sitio web. A baja velocidad, el Tetraedro se acomoda lentamente sobre tres carcazas. A alta velocidad,  los aerodeslizadores giran en el casco inferior sumergido, dando lugar a la misteriosa elevación del triángulo fuera del agua.

Aunque las operaciones de la embarcación tienen lugar entre la ciencia ficción y la realidad, sus representaciones muestran un yate estacionario que tiene todas las acomodaciones y lujos asociados a yates de la vida real. Sin embargo, no es un elevado estilo de vida lo que Schwinger quiere mostrar con la creación de este diseño innovador.

Largas distancias son alcanzadas con la reducción del arrastre en el agua y las condiciones tormentosas del océano incurrirían prácticamente sin ningún efecto sobre el Tetraedro, señaló Schwinger. El mejoramiento de la eficiencia está sujeto a los propulsores aerodeslizadores los cuales serían un ingrediente clave para este tipo de diseño.

No importan las condiciones en las que el Tetra se encuentre, el buque navegaría con absoluta facilidad. Además, se estima que alcance una velocidad durante su despegue del agua de unas 17.2 millas por hora y hasta 43.7 millas por hora en su forma sobre-agua. El rango de navegación se estima alcance las 3,000 millas náuticas. De ser construido, la carcaza estaría fabricada de fibra de carbón y acero doble laminado para una acomodación de unos 10 pasajeros en total – 6 pasajeros y 4 miembros de la tripulación.

Aunque la probabilidad de adaptación de este diseño en la vida real es relativamente bajo, sigue siendo un sueño para los billonarios del mundo.