Alphabet, la casa matriz de Google, informó sobre el despido de un ejecutivo de la compañía –Rich DeVaul, unos de los directores de la unidad de investigación de Google– acusado de acoso sexual, que se ha marchado de la empresa sin indemnización.
Google hizo pública esta decisión como respuesta al creciente descontento entre los trabajadores con la forma en la que la compañía está gestionando los asuntos sobre acoso sexual. De hecho, las empleadas ya tenían prevista una jornada de protestas para este jueves.
Este movimiento no ha impedido que este jueves 1 de noviembre, centenares de trabajadoras y trabajadores de Google de 78 oficinas de todo el mundo han hecho parones en protesta por la falta de firmeza en la forma de actuar de la compañía.
La iniciativa ‘Marcha de Google por un cambio real‘ (Google Walkout For Real Change) ha propuesto paros para las 11.10 de la mañana, hora local de cada sede. Los organizadores confían en que esta protesta sea secundada por al menos 1.500 trabajadores.
Esa indignación llegó a niveles muy elevados tras saberse, la semana pasada, que Google protegió al creador de Android, Andy Rubin, tras ser denunciado por acoso sexual y le pagó 90 millones por su salida.