La tregua de aranceles entre la Unión Europea y Estados Unidos no ha puesto fin a los “profundos desacuerdos” sobre política comercial, dijo esta semana la comisaria de Comercio de la Comisión Europea, Cecilia Malmstrom.

El presidente de EE.UU., Donald Trump, aceptó en julio no imponer aranceles a los vehículos mientras ambas partes trataban de reducir otras barreras comerciales, una decisión definida por el presidente de la Comisión Europea en aquel momento como una importante concesión.

En declaraciones a la comisión de Comercio del Parlamento Europeo, Malmstrom dijo que negocian formar un grupo que ella y el representante de Comercio de EE.UU., Robert Lighthizer, liderarán para decidir cómo podrían eliminarse los aranceles sobre bienes, reportó la agencia británica de noticias Reuters.

“No vamos a negociar nada, tenemos un equipo de trabajo. Tenemos profundos desacuerdos con Estados Unidos sobre política comercial”, remarcó Malmstrom a los diputados europeos.

Algunos de estos criticaron firmemente la propuesta de una Asociación Transatlántica para el Comercio y la Inversión (TTIP, por su sigla en inglés), cuyas negociaciones terminaron tras la victoria electoral de Trump en 2016.

“No vamos a comenzar de nuevo las conversaciones del TTIP… Este podría ser un acuerdo comercial más limitado, centrado únicamente en aranceles aplicados a productos”, especificó Malmstrom.

Agregó que la Unión Europea estaría dispuesta a reducir a cero los aranceles aplicados a automóviles, si EE.UU. también lo hiciera, yendo más allá del acuerdo provisional acordado en julio, en el que se aludía solo a “bienes industriales no automovilísticos”.

“Lo haríamos si ellos lo hicieran. Eso está por ver”, señaló, y añadió que esperaba que el acuerdo pudiera cerrarse hacia el final del mandato de cinco años de la Comisión, que termina el 31 de octubre de 2019.